Morfología y Ciclo de vida del gusano cogollero

El gusano cogollero, cuyo nombre científico es “Spodoptera frugiperda“, es una plaga que afecta principalmente a cultivos de maíz, sorgo, arroz y otros cultivos de cereales.

El insecto Spdodopter frugiperda pasa por varias etapas de desarrollo en su ciclo de vida, pero el término gusano cogollero se refiere a su fase larvaria, que es la más dañina para los cultivos. Son de color variable, pero generalmente de tonos verdosos o pardos. Su tamaño puede variar desde unos pocos milímetros hasta varios centímetros, dependiendo de la etapa de desarrollo.

Características morfológicas

• Tiene el cuerpo dividido en varias secciones: cabeza, tórax y abdomen.
• La cabeza es de color marrón y tiene mandíbulas fuertes que utiliza para masticar las hojas de las plantas.
• También tienen antenas en la parte frontal de la cabeza.
• El tórax está compuesto por tres segmentos, cada uno con un par de patas verdaderas que utilizan para desplazarse por las plantas.
• El abdomen consta de varios segmentos y está cubierto por anillos.
• A lo largo del abdomen, se encuentran las patas falsas, que son pequeñas protuberancias que les ayudan a sujetarse a las plantas mientras se alimentan
• Además de las patas verdaderas en el tórax, el gusano cogollero tiene una serie de prolegs en el abdomen. Son pequeñas ventosas que les permiten moverse y sujetarse a las hojas de las plantas.
• A lo largo del cuerpo tienen pequeñas espinas o tubérculos dorsales que son características distintivas y pueden ayudar a identificar la especie.

La morfología del gusano cogollero puede variar ligeramente según su edad y condiciones ambientales, pero en general, estas son las características principales que puedes observar en este insecto.

El ciclo de vida del gusano cogollero

El insecto plaga pasa por varias fases en su desarrollo biológico:

Huevo

El ciclo de vida del gusano cogollero comienza con la puesta de huevos. Las hembras adultas depositan sus huevos en grupos de 100 a 200 en las hojas de las plantas hospedantes, generalmente cerca del área del cogollo.

Larva

Cuando los huevos eclosionan, nacen las larvas. Estas larvas pasan por 6 etapas de desarrollo (instares) durante su vida larvaria. Durante esta fase, las larvas se alimentan de las hojas, tallos y cogollos de las plantas. En una fase de su desarrollo las larvas tienen un comportamiento que es la causa de que la mayoría de los tratamientos químicos no causen efecto. Más adelante hablaremos de ello.

Pupa

Una vez que las larvas han alcanzado su tamaño máximo, se entierran en el suelo para pupar. Durante esta etapa, se transforman en pupas inmóviles, donde se produce la metamorfosis hacia la fase adulta. La pupación puede durar aproximadamente 1-2 semanas.

Adulto

Los adultos son polillas nocturnas de hábitos migratorios y se reproducen para comenzar el ciclo nuevamente. La duración de la fase adulta es relativamente corta, ya que su principal objetivo es la reproducción.

El ciclo de vida de Spodoptera frugiperda puede variar según las condiciones climáticas y la disponibilidad de alimentos. En áreas tropicales y subtropicales, donde esta plaga es más común, su ciclo de vida puede ser continuo durante todo el año. La larva es la etapa más destructiva, ya que se alimenta activamente de las plantas y puede causar daños significativos en los cultivos.

Control del gusano cogollero

La monitorización y el control temprano son cruciales para gestionar el gusano cogollero y minimizar los daños en los cultivos. Los adultos del gusano cogollero son más activos por la noche, lo que los hace difíciles de detectar y controlar durante el día. Además a partir del tercer instar larvario se introduce en el cogollo del maíz donde se alimenta, siendo más difícil su localización y se encuentra a salvo de los tratamientos.

Pérdida del rendimiento del maíz por daños del gusano cogollero

Cada año se repite la misma situación: infestaciones incontroladas de gusano cogollero atacando los cultivos de maíz de América del Sur y Centroamérica (México, Bolivia, Ecuador, Argentina, etc), en grandes extensiones de cultivo y ocasionando enormes pérdidas en los productores, llegando a mermar la rentabilidad del maíz.

Los ataques del gusano cogollero son endémicos en aquellas zonas en que la climatología es favorable para su desarrollo: temperaturas superiores a 25ºC y una humedad relativa menor al 60%. La falta de lluvias también favorecen su rápido desarrollo.

Si tenemos un rendimiento promedio en maíz mecanizado de 5tm/ha, las pérdidas que puede ocasionar el gusano cogollero pueden llegar al 40 % , es decir pérdidas aproximadas de $USD 416 por hectárea, a un precio promedio 2018.

En regiones tropicales y subtropicales los daños regularmente son superiores a 60%. En grandes extensiones, supone pérdidas de cientos de miles de millones de $USD.

Los tratamientos contra las plagas agrícolas, preventivos o fijos por fechas de calendario, tienen muy poca eficacia y favorecen la resistencia de las plagas a los insecticidas químicos.

Control Biológico:

Algunos insectos parasitoides y depredadores, como avispas parasitoides y aves, se alimentan de las larvas del gusano cogollero. Fomentar la presencia de estos organismos en los campos agrícolas puede ayudar a controlar la población de la plaga.

Se han desarrollado productos que contienen baculovirus específicos para el gusano cogollero. Estos virus son letales para las larvas de la plaga y se pueden utilizar como una alternativa biológica al control químico.

Algunas variedades de maíz y otros cultivos se han modificado genéticamente para expresar proteínas Bt, que son tóxicas para las larvas del gusano cogollero pero seguras para los humanos y otros organismos no objetivo. Plantar cultivos Bt puede reducir la necesidad de aplicar insecticidas químicos.

Mantener un hábitat diverso en los campos agrícolas, con la presencia de plantas refugio y flora silvestre, puede fomentar la presencia de depredadores naturales del gusano cogollero.

Tratamientos de control químico

Hay que tener en cuenta que:

• Es importante utilizar los pesticidascon precaución y siguiendo las recomendaciones de seguridad, ya que el uso excesivo de insecticidas puede tener efectos negativos en el medio ambiente y la salud humana.
• Hay que tratar deminimizar el uso de insecticidas, aplicándolos solo cuando sea necesario.
• La rotación de diferentes clases de insecticidas puede ayudar a prevenir la resistencia del gusano cogollero a los productos químicos.

La eficacia de los insecticidas en el control de larvas de Spodoptera frugiperda es muy diversa y en algunos caos variable.

Incremento en el uso de pesticidas

Las pérdidas de cosecha y el incremento en el consumo de pesticidas se repiten anualmente, con continuo endeudamiento del productor.

Si en condiciones normales, se pueden hacer 2 o 3 aplicaciones por temporada, con un coste $USD 109/TM, un ataque de la plaga puede llegar a aumentarlas a 5 o 7, incrementando su coste a $USD 211/TM. De hecho pueden llegar a necesitarse  hasta 10 aplicaciones para controlar la plaga. Y el coste del tratamiento puede llegar a superar el precio de venta de la propia cosecha.

Sin embargo los ataques de esta plaga se pueden controlar sin inconvenientes, siempre que las acciones de monitoreo y tratamientos se realicen en su momento oportuno. Porque la mayoría de los tratamiento se realizan tardíamente, cuando la larva ya se encuentra dentro del cogollo.

¿Cúal es el momento óptimo de tratamiento?

El momento óptimo de tratamiento es aquel que sucede antes de que la larva se desarrolle más de 1,5 cm (es decir, el tercer instar larvario) ya que a partir de ese tamaño las larvas se alojan en el cogollo o en la espiga, dependiendo del momento del cultivo, di­ficultando su control al no ser alcanzadas por el pesticida.

En términos generales, el período larvario del gusano cogollero dura un promedio de 14-22 días, pasando generalmente por seis o siete instars larvarios. El ciclo completo (de huevo a adulto) dura aproximadamente entre 24 y 40 días.

Pero no todos los años se producen los cambios en su desarrollo en las mismas fechas porque evidentemente las condiciones climatológicas que afectan a su desarrollo varían anualmente.

Habitualmente las larvas pasan inadvertidas hasta que alcanzan 20 a 25 mm, cuando son detectadas por los daños que causan, que suele ser en el sexto instar larvario.

¿Cómo se determina el momento óptimo de tratamiento?

Para el adecuado control de la plaga no se trata de repetir tratamientos, o de cambiar de producto químico, sino de tener la capacidad de determinar el cuándo es más eficiente (antes del tercer inslar larvario).

El control de la plaga es posible, simplemente conociendo los mecanismos de la naturaleza, automatizando la recogida de datos, calculando las fechas de los eventos y avisando al productor para que pueda tomar las decisiones adecuadas.

FuturCrop es un software que utiliza la relación existente entre las condiciones climatológicas y el desarrollo de la plaga, para calcular la fecha en que se producen los cambios en su ciclo biológico. FuturCrop calcula y predice las fechas en las que el gusano cogollero alcanza los estados de oviposición, eclosión de huevos, los 6 instar larvarios, pupas y adultos.

Nota: Las multinacionales fabricantes de insecticidas químicos están cambiando la estrategia de sus campañas de ventas. Sus campañas de comunicación hablan ahora del actual/futuro en el control de plagas del maíz, eliminando los pesticidas en la agricultura mediante la comercialización de semillas genéticamente modificadas. Como ya poseen su propiedad intelectual, les queda apropiarse del germoplasma del maíz.

Manuales

Información adicional

Acción mundial de lucha contra el Gusano cogollero del Maíz, Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO)

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